“La pradera de San Isidro” es
una de las obras más comentadas y valoradas del pintor español Francisco de
Goya. La pintó en 1788 como un dibujo pequeño para una serie de cartones, cuyas
imágenes se utilizarían para las imágenes de grandes tapices royales. Sin
embargo, el rey español de aquella época Carlos III se murió antes de que se
pudiera cumplir el trabajo entero, y por eso esta pintura quedó en su forma
miniatura. El cuadro presenta en muy pequeñas dimensiones una gran sensación de
espacio: aparece una gran cantidad de gente que disfruta juntos del día de
festivo. Hay ciertas sensaciones de vida además de bullicio entre las personas
que están al frente de la pintura, formando una visión feliz y viva de esta
festividad. Más que las personas que ocupan el cuadro, creo que el protagonista
mayor de esta imagen es el paisaje urbano de Madrid, extendido desde el río
Manzanares. En el fondo del cuadro existe una vista de la ciudad de Madrid de
esa época, y se puede ver edificios importantes de la ciudad, como el Palacio
Real y la Real Basílica de San Francisco el Grande. Esta pintura tiene mucha
importancia porque contiene uno de los pocos paisajes realistas que pintó Goya.
De hecho, pintó paisajes en raras ocasiones y los que sí pintó son imprecisos e
a veces irreales o tienen un alto contenido de idealización, con algunos de sus
elementos poco definidos. Son como apuntes a los que no se prestan atención
excesiva sino que sirven como fondos de obras con otro personaje fuerte en
frente. En cambio, en “La pradera” se puede notar un estudio de lo natural en
los colores utilizados y la imagen de la ciudad creciendo en el fondo. Se dice
que Goya quiso representar un lugar preciso, establecer un sitio claro para
mostrar esta fiesta popular en todo su valor. Por esta situación, pudo describir
algunos detalles de la capital del reino y exponer la Madrid de hace doscientos
años. Con el perfil de la ciudad con sus edificios religiosos y el Palacio Real
que parece tanto proteger el bienestar de la población como vigilar que todo puede
continuar desarrollándose con las garantías de paz y tranquilidad, la gente
asiste al festivo tradicional madrileño con éxito y felicidades.
Creo
que esta visión de Madrid es importante porque da un contexto histórico a la
ciudad de hoy y de dónde ha venido. Creo que refleja una tradición de la ciudad
por los festivos, pero a la vez existe una visión optimista del futuro por la
ciudad creciendo en el fondo. Es una perspectiva interesante de la ciudad de
Madrid, y me ha gustado mucho ver el cuadro real en el Museo del Prado a pesar
de su tamaño pequeño.
-Ani
Rodriguez
La pradera de San Isidro, Francisco de Goya, 1788 |
Gracias por el post Ani! Es muy impresionante y interesante para ver una vision de Madrid sin rascacielos o edificios altos en el cielo. Yo pienso que Goya ha capturado una vista de Madrid que muchas veces nosotros no realizamos que la ciudad era asi. Ahora, tenemos un paisaje urbano pero cuando mira a la obra esa es tu version de una ciudad y es muy interesante para mirar a la yuxtaposicion de los dos.
ReplyDelete~Karly
Me encanta este obra de Goya. Me gusta ver sus cuadros mas alegrias, porque en arte escribe mi trabajo sobre sus Desastes de La Guerra y aprendimos mucho sobre cuadros mas oscuras, como Las Pinturas Negras.
ReplyDeleteEsto es una escena bella de Madrid- me encanta los detalles y el fondo con El Palacio Real. Recuerdo mis impresiones cuando vi este en el Prado y me gusta el tomano pequeno y los colores de Goya.
Es muy interestante para ver Madrid en al pasado y ver ahora en el presente...Me pregunto cómo va a ser en el futuro...
-Sadhna