Carmen Peñamaría está orgullosa llamarse madrileña, afortunadamente. Aunque sus raíces son gallegas, y tiene mucha familia todavía en un pueblo pequeño de Galicia, ha llevado una gran parte de su vida en Madrid, y no la cambiaría por nada. Verdaderamente, Madrid es su propia ciudad, su hogar auténtico, y la quiere intensamente. Cuando tenía cuatro años, se mudó a Madrid con sus hermanos mayores para vivir con sus abuelos, y se quedó hasta que se casó con su marido y volvió al pueblo gallego para tener su familia. Sin embargo, su estancia allí no duró más que quince años: cuando se divorció de su marido, en seguida se sintió claustrofóbica en ese pueblo. Todo el mundo se metían en los asuntos de los otros, y le molestaba que su vida no fuera privada y la suya. Entonces, Carmen supo que tenía que irse con sus hijos, y no hubo ninguna duda a dónde iba a mudarse: Madrid. Dice que algo en la ciudad la llamó y no pudo vivir en ninguna otra ciudad con calma. Hace veinte y cinco años se mudó con sus hijos a Madrid, y ha vivido aquí desde entonces. A Carmen, le encanta el tamaño de la ciudad, que le da bastante espacio cuando lo quiera, pero tampoco es demasiado grande que se siente perdida en sus calles y entre sus edificios. Uno puede respirar en Madrid, ella dice, y se puede encontrar a amigos si los quieras; pero se puede tener una vida suya sin los ojos del mundo mirándola, y a Carmen le encanta este aspecto. Además, cree que Madrid es su hogar y siempre será, porque la conoce muy bien y le parece a ella que la ciudad la conoce también. No quiere decir que la Madrid de su juventud es la misma Madrid de hoy en día, porque para Carmen eso no es la verdad. La ciudad ha cambiado mucho, con nuevos sitios y tal y cual, pero la persona que Carmen es ha cambiado también, y la ciudad le ha servido por todas sus etapas de vida. Y además, todavía existe la libertad que quiere. A partir de eso, a Carmen le fascina la gente madrileña. Le parece abierta y amigable, y son personas que no tienen ningún problema hablar contigo si quieres hablar, pero tampoco invaden tu vida. Eso le encanta, porque puede vivir pacíficamente cuando está rodeada de gente tan agradable. Sus sitios favoritos de Madrid son las partes más antiguas, especialmente el barrio en que existe El Rastro los domingos. También, le gusta La Puerta de Alcalá, la cual le parece encantadora.
La Puerta de Alcalá, Madrid
AnnMarie Rodriguez, 9 de febrero 2012
Ani me encanta su post. Tambien me gusta que Carmen hizo comentarios del tamaño de la ciudad. En mi opinion, se parece que ningunos de los barrios son los mismos exactamente. Hay un sentimiento de espacio que yo no tengo cuando yo visito a Nueva York. No sé por que pero a mi se parece menos aplastante en Madrid. Especialmente, cuando yo voy y me oriento con las calles desconocidas de Madrid. Nunca no me siento que estoy perdido en la ciudad completamente En adicion, yo estoy de acuerda con ella cuando ella dice que, "uno puede respirar en Madrid."
ReplyDelete~Karly
Aní, me gusta este post mucho y es interesante para aprender mas sobre su señora! Mi familia también es de Galicia. Es interesante los eventos en la vida de Carmen y porque ella se mudo a Madrid. Me gusta el tamaño de Madrid también, pero es muy diferente para mi porque es mas grande de mi cuidad de Boston. Es interesante que ella dice "uno puede respirar en Madrid" porque es una imagen muy fuerte que evoca mucho emoción y una descripción precioso. Yo estoy en acuerdo con sus pensamientos que la gente de Madrid es abierta. Me encanta el lugar del Rastro también!
ReplyDeleteGracias por su post!
Sadhna